El primer secretario del Comité Central del Partido Comunista y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, encabezó en la mañana de este sábado una reunión de trabajo donde se evaluaron de manera preliminar las principales afectaciones ocurridas en La Habana durante las últimas horas, en las cuales se ha manifestado una muy compleja situación meteorológica.

En la reunión, que tuvo lugar en la sede provincial de la Empresa Eléctrica, se explicaron también las acciones fundamentales implementadas para ir dando solución en el menor tiempo posible a los daños que hasta el momento se contabilizan.

Tras reconocer la capacidad de organización con que se trabajó en este territorio, el jefe de Estado insistió en la necesidad de actualizar los planes de reducción de desastres, a partir de cómo se han producido los hechos y las inundaciones que ocurrieron en lugares donde hace años no sucedía.

Ahora lo más importante es “trabajar duro para lograr que en el transcurso del fin de semana la población tenga las menores afectaciones posibles”, dijo, e insistió en el principio que se debe poner en práctica de que cada cosa dañada debe quedar en mejores condiciones a como estaba con anterioridad.

De acuerdo con la información ofrecida por la gobernadora Yanet Hernández Pérez, las incidencias más significativas se reportan en los municipios Boyeros, Diez de Octubre, Cotorro, San Miguel del Padrón, Arroyo Naranjo, La Lisa y Cerro.

Aun cuando las cifras que se han reportado no son definitivas, al cierre de las seis de la mañana se reportaban derrumbes totales en 26 viviendas y parciales en otras 122.

Producto de las inundaciones en varias zonas de la ciudad, 148 personas habían sido protegidas en centros estatales y 762 estaban autoevacuadas en casas de familiares o amigos.

En los lugares donde la mejoría del clima lo ha permitido, desde horas de la noche se iniciaron las labores de limpieza de las principales vías para restablecer el tránsito por ellas, dijo la gobernadora.

Sobre los daños en el servicio eléctrico, se informó que se produjeron averías en 78 circuitos, 36 de ellos ya con servicio mientras transcurría la reunión. Más de 250 000 clientes fueron afectados por esta causa. En el momento del chequeo con la dirección del país, esa cifra había disminuido a 120 000.

Acerca de las principales acciones que se han ido desarrollando y otras previstas, el director general de la Unión Eléctrica, Alfredo López Valdés, explicó que en las próximas horas estarán arribando a la provincia cinco brigadas procedentes de otros territorios para apoyar la recuperación.

En paralelo, se desarrollan acciones en las provincias de Mayabeque, Artemisa y Matanzas, donde las inclemencias del tiempo también provocaron daños en varios circuitos.

Al término de la reunión, donde también estaban presentes los miembros del Buró Político Manuel Marrero Cruz, primer ministro, y Roberto Morales Ojeda, secretario de Organización del Comité Central, el primer secretario del Partido en La Habana, Luis Antonio Torres Iríbar, aseguró al equipo de prensa de la Presidencia que han sido muy intensas las lluvias en la capital durante las últimas horas.

Según Torres Iríbar, hay lugares donde se contabilizan más de 300 milímetros de lluvia en 24 horas, lo cual trajo consigo, además de inundaciones en varios lugares, serias afectaciones en el servicio eléctrico, lo que que a su vez incide en la capacidad de bombeo de agua de los sistemas de acueducto.

Respecto a la agricultura, explicó que aún cuando no es posible tener una dimensión exacta de los daños. Se destacan afectaciones en casas de cultivo y de sombra, y la caída de granizo afectó también importantes plantaciones.

Refirió que se han habilitado oficinas de trámites en todos los consejos populares afectados con “el objetivo de que la población pueda tener la cercanía de los servicios y a su vez conocer con mayor inmediatez la situación que tiene y así nosotros poder calcular los daños y tomar las decisiones más correctas”.

Como prioridades para el trabajo de las próximas horas, mencionó la recuperación del servicio eléctrico en la medida que la lluvia lo permita; abrir paso en todas las comunidades, en todos los barrios donde se han derribado árboles, y atender a las personas para saber qué afectaciones tienen.

Al referirse a la agilidad con que se ha trabajado, Torres Iríbar destacó la dimensión que tiene el socialismo en Cuba, así como la cultura de defensa civil, no solo de los cuadros, sino de todo el pueblo, que han permitido una articulación ante este tipo de fenómenos, “porque la gente se anticipa, la gente se prepara y tiene espíritu de ayudarse, de actuar como país”.

A nuestro pueblo –subrayó–, que sepa que “todas las instituciones nos vamos a volcar en cuerpo y alma, para que en el menor tiempo posible se logre recuperar todo lo que se ha afectado”.

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